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viernes, 25 de octubre de 2019

Las acciones de Ubisoft sufren su mayor caída en seis años tras las malas ventas de sus juegos y los recientes retrasos #Vidaextra


Las acciones de Ubisoft sufren su mayor caída en seis años tras las malas ventas de sus juegos y los recientes retrasos

Ubisoft está en un punto crítico del actual año fiscal. La compañía gala no está rindiendo tanto como se esperaba para ser uno de los máximos exponentes del AAA, y eso se ha dejado ver en la bolsa.

Bloomberg informa que las acciones de Ubisoft han sufrido su mayor descenso singular en seis años con una pérdida de valor del 29% en París. Poco después han subido un poco hasta conformar, en el momento de publicar esta noticia, una caída del 17%. En cualquier caso, se trata de un duro golpe del que tendrán que recuperarse.

Todo esto surge a raíz de que la compañía redujera drásticamente sus expectativas de ingresos operativos para el presente año fiscal. Desde los 480 millones de euros iniciales han pasado a predecir una cantidad entre 20 y 50 millones. La reducción viene tras el retraso de tres de sus grandes títulos, que son Watch Dogs Legion, Gods & Monsters y Rainbow Six Quarantine. Todos ellos se van para el próximo año fiscal, como os contamos ayer.

Ghost Recon Breakpoint

Ubisoft decidió retrasarlos para que el tiempo extra de desarrollo desembocara en una mayor calidad del producto final. La culpa, como ha explicado el propio Yves Guillemot en una llamada con analistas, la tienen las ventas de Ghost Recon Breakpoint y The Division 2, que han sido bastante más bajas de lo esperado. Guillemot admite que el primero incluso ha decepcionado a la crítica. "No hemos cumplido con esos juegos", explica.

Robert Berg, analista de Berenberg, opina que Ubisoft va por el buen camino retrasando sus próximos lanzamientos.

Está claro que hará falto algo de confianza para recuperarse. Aunque ha tenido que ser una dura decisión, creemos que la administración está tomando la decisión adecuada al retrasar estos juegos.

Estos juegos eran dos de los principales activos de Ubisoft en un año en el que no tocaba nuevo Assassin's Creed, por lo que encima jugaban con desventaja. Parece que este desafortunado suceso ha servido como golpe de realidad para la compañía, que ahora promete esforzarse más en sus grandes bazas. ¿Conseguirán remontar en el siguiente año fiscal?