Dos años han pasado desde que hablamos por primera vez de Black Future '88. Por aquel entonces ya comentábamos el aluvión de títulos ambientados en un retrofuturo ochentero, algo que no ha hecho más que aumentar desde entonces y que quitan algo de frescura a un título que ya apuntaba buenas maneras y que muy poco antes de su salida parece confirmar todo lo que se esperaba de él.
El mundo sufre las consecuencias de una hecatombe nuclear desencadenada por Duncan, el arquitecto de la torre. La primera bomba cayó durante el verano de 1988; en diciembre de ese mismo año, unas nubes de lluvia constante ya cubrían el cielo por completo. A partir de ese momento, decidimos dejar de medir el tiempo, por ello seguimos en 1988 desde entonces. Todo lo que sobrevivió al ataque inicial perecerá en las inundaciones extremas que están por llegar. Así son las cosas ahora, no hay meses ni semanas… Ahora todo se mide en minutos de vida.
Vale, quizás no sea la premisa argumental más trabajada del medio, pero es más que suficiente para lo que nos espera.
Nuestra misión consiste en encarnar a uno de los últimos rebeldes y ascender a través de una torre generada proceduralmente en cuya cima se encuentra nuestra única posibilidad de supervivencia. Para ello contamos con un tiempo límite, un montón de armas y cinco personajes diferentes con distintas habilidades. Reconozco que el excesivo, aunque coherente, espectáculo de luces hace que me pierda un poco, pero aún así el conjunto artístico me gusta. Por lo demás estamos ante un roguelike de manual que pretende a base de de un conjunto de sólidas mecánicas y MUSICOTE sacarnos un buen puñado de horas de juego. A todo esto hay que sumarle un modo cooperativo que nos puede dar muchas alegrías.
Black Future '88 estará disponible para Windows y Nintendo Switch el próximo 21 de noviembre. Recuerden que pueden estar al tanto de todos los lanzamientos interesantes de LO INDIE en nuestro Calendario Indie.
