Ayer volvió Doctor Who, y como homenaje hemos decidido alterar el tiempo y el espacio y convertir este domingo en sábado. Por eso estamos sacando hoy el Diario del Desarrollador. Sí, hoy es sábado otra vez, así que mañana no trabajáis. De nada. El espacio también lo hemos toqueteado: no os habéis dado cuenta, pero estáis leyendo esto sentados en el techo. Cuidado con la cabeza cuando os caigáis.
Tiene narices
Desde luego tiene narices que Kickstarter sea cada vez más un campo de batalla para los proyectos indie y un paseo sin despeinarse para los grandes. Así que vamos a repasar algunas campañas interesantes a las que podemos arrojar nuestros dineros. Como Nosebound, aventura episódica de estética noir de los argentinos Quarantine Interactive, que utiliza el negro, el rojo y, ojo, OTROS COLORES más en sus escenarios. Disruptivo.
Tributo a la monarquía
La campaña de For the King, roguelike con online cooperativo y pinceladas de estrategia por turnos, está ya financiada con éxito. Y vaya éxito. Pero es más bonito que un San Luis (mirad esta galería, mirad), así que no podemos dejar de recomendarlo. Vamos a ayudarles a seguir cumpliendo metas.
Cierra que se escapa el gato
Otra campaña financiada que nos encanta. A House of Many Doors es un proyecto que mezcla RPG y ficción interactiva, apadrinado por nuestros queridos Failbetter Games en su programa de incubación. Su creador, Harry Tuffs, parece haber captado bien las enseñanzas de sus mentores, como muestra esta interesante entrevista en Indie Games. Aún tenéis doce días para llevaros vuestra copia.
Niñoh malajeh
Nos vamos ahora a Steam Greenlight y os enseñamos un juego que lleva el nombre de un excelente capítulo de Expediente X, lo cual le da un plus de molonidad a cualquier cosa. Bad Blood nos propone jugar al escondite en un campo de maíz, con el aliciente de poder destripar a nuestro rival con una hoz cuando lo encontremos. La comunidad steamera, siempre predispuesta a todo lo que sea destripar, ya le ha dado luz verde.
Frisbies agresivos
El lanzamiento de disco playero puede ser una disciplina olímpica muy agresiva. Nos lo enseñó hace un puñado de años el maravilloso Windjammers, juego al que rinden homenaje los españoles Pixel Cream con su Way of Redemption. La mecánica es idéntica a la del clásico de Data East, pero el escenario se traslada a una ambientación fantástica y muy espectacular. Se merecen nuestras monedas de cinco duros y nuestros votos en Steam Greenlight.
Ver noticia originalFuente: indie-o-rama
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